A principios de año leí la novela Mañana en la batalla piensa en mí de Javier Marías. Aunque suene un poco frívolo admitirlo, adentrarme en sus páginas representó para mí un salto de fe que me aterraba un poco dar. Si bien se trata de un autor muy célebre en su España natal, conocía poco y nada de él en el momento en que compré el libro. Había visto su nombre en las librerías y, quizás, lo escuché nombrar en una o dos ocasiones. No tenía idea de qué tipo de literatura escribía, cuáles eran sus libros conocidos, ni si se trataba siquiera de un buen escritor. Debo reconocer que mi primera lectura de este autor la hice completamente a ciegas y, en consecuencia, me sorprendió muy agradablemente.

El estilo de Javier Marías

      Javier Marías es uno de esos autores que escriben el tipo de prosa que más me atrae: elaborada, introspectiva, poética, reflexiva y recargada de imágenes visuales. He descubierto en él un autor al que gratamente regresaré en el futuro y del que quiero explorar muchas obras de su producción. La calidad de su voz narrativa, única e inigualable, hizo que me devorara el libro con un gran placer lector que me acompañó hasta la última página.

¿De qué trata Mañana en la batalla piensa en mí?

      Mañana en la batalla piensa en mí cuenta la historia de Víctor Francés, un guionista de cine frustrado que tiene el atrevimiento de visitar a una mujer casada mientras su marido está de viaje de negocios en Inglaterra. Esta cita improvisada con la joven en cuestión -Marta Téllez- estará marcada por la presencia de su hijo de dos años y por una cena elaborada con la que ella claramente intentará impresionarlo. El motivo de este encuentro tiene claras intenciones sexuales y, una vez que el niño es llevado a dormir, Víctor y Marta se dirigen al cuarto para empezar con el cortejo. Sin embargo, un evento fortuito, inexplicable y repentino pondrá fin a sus planes de manera inmediata: la muerte súbita de Marta Téllez. Acorralado por una situación tan imprevista como imposible -una mujer muerta, un niño al que no puede abandonar, un marido al que no puede llamar-, Víctor tomará la salida del cobarde y huirá del departamento en plenas horas de la madrugada. A partir de entonces, el viaje del protagonista consistirá en descubrir qué fue lo que paso luego de su ausencia, cómo reaccionó la familia de Marta y qué sucedió con el marido y el hijo. Y, al compenetrarse en el mundo de los Téllez, descubrirá secretos infames que jamás había sospechado hasta el momento.

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La muerte como tema central

       La temática del libro, obviamente, es la muerte. Pero no la muerte como evento en sí, sino la manera en que reaccionamos ante ella: los cambios que provoca en nuestras vidas, la manera en que decidimos acomodarla en el esquema de nuestra existencia y la relación que sostenemos con las personas que ya no están entre nosotros. También explora la idea del azar como golpe brutal y analiza el engaño en todas sus manifestaciones. La infidelidad aparece en cada página tratada de manera neutral, sin intenciones de aleccionamientos morales. Es, sin dudas, una lectura profunda, sobrecargada de alusiones al cine y a la literatura, cuyo estilo fluido te transporta de idea a idea con una liviandad asombrosa.

Una lectura compleja

      No es una lectura ligera, y en ocasiones tampoco es sencilla. A veces el autor se desvía por tangentes extrañas, otras veces se vuelve denso en el entramado metafórico y, en más de una ocasión, crea giros de trama que a simple vista parecen decorativos. Sin embargo, la novela no decepciona y termina respondiendo a todos los interrogantes que plantea, en escenas que terminan siendo satisfactoriamente dramáticas. 

Mi experiencia con la novela

       Lo único que llegó a desagradarme del libro (y lo que me llevó a bajarle un punto en mi calificación de 4/5 estrellas en Goodreads) fue el hecho de que termina muy abruptamente. La escena final de la novela es una que venimos esperando desde el comienzo del libro, donde una conversación nos revelará detalles sorprendentes sobre uno de los personajes, y termina cumpliendo con lo prometido. Sin embargo, luego de hacer dichas revelaciones, el libro culmina sin ningún tipo de transición. Hubiese sido interesante una escena final, o incluso un capítulo adicional, para terminar de cerrar la historia de manera más conclusiva.

      A pesar de sus defectos, opino que Mañana en la batalla piensa en mí es una extraordinaria novela. Es breve, compleja, con personajes interesantes, diálogos estupendos y situaciones que son tan absurdas como atrapantes. Es una obra que vale la pena y no puedo dejar de recomendarla.

       ¿La has leído? ¿Vas a leerla? ¿Qué otras novelas de Javier Marías me recomendás? Contame en los comentarios :)